LA SANGRE MANDA – DE STEPHEN KING.
ISBN:
9780593311523 Tapa blanda
9781982137977 Tapa dura
9781797104799 Audiolibro
9788401024764 E-libro
Lo he leído en una edición Vintage comprado cinco meses antes. Lo leí desde el 21 de junio pasado. Cuesta en Amazon 22,70 eu tapa dura, 64,99 tapa blanda. 9,49 eu Ebook. 12,30 eu tapa blanda en Casadellibro.com
La estructura del libro son cuatro relatos cortos, uno de los cuales entronca directamente con otras novelas recientes, “La sangre manda”, con la saga de Holly Gibney comenzada con “Mr. Mercedes” y continuada con títulos como “Fin de Guardia” o “El visitante”. Ya no está vivo el villano Brady Hartsfield pero hay algo, eso, el individuo u organismo, que va haciendo de las suyas, reducido de una manera un tanto particular y sorprendente en “La sangre manda”, con cierta ayuda aunque un tanto accidentada de los hermanos Jerome y Barbara Robinson. El individuo, ectoplasma o lo que quiera que sea, con ciertos poderes supranaturales, capaz de vivir tres vidas de un centenario, se encarna en esta vida en la de un periodista tras otro, adicto a las desgracias personales y colectivas. Un policía al final de su vida lo destapa, con ayuda de su nieto y de Holly Gibney.
Los otros tres relatos son, el primero, referente a la vida de un millonario excéntrico cuidado por un muchacho que no se deja arredrar por el abusón del colegio, que descubre cómo amasar más dinero gracias a un móvil iPhone al comienzo de la crisis de principios del siglo XXI, pero muere repentinamente, el señor Harrigan. Se le entierra con el móvil y el chaval oye a veces el contestador del teléfono del millonario, más un gorgoteo indefinido. El abusón y otras personas que se ponen en su camino mueren misteriosamente, el muchacho hereda dinero de un fondo fiduciario o, como se le dice al otro lado del charco, un fideicomiso hasta la edad de 26 años. Es moderadamente rico. Decide invertir.
“La vida de Chuck”, sobre un hombre de 39 años que va a morir irremisiblemente, la pequeña ciudad donde vive le homenajea ya que morirá, por tierra, mar y aire. Se centra parte del relato en que, a ritmo de rock, el felizmente casado Charles, con dos hijos, baila al son de un hombre orquesta o similar, con una chica que le sigue maravillosamente el ritmo. Chuck es empleado de banca, hasta entonces se le consideraba alguien aburrido. El relato abunda en la infancia de Chuck, sin padre ni madre, criado por la abuela.
Después de “La sangre manda”, el relato “La rata”, que retoma el escenario de “Un saco de huesos” del mismo autor: la TR-90, rebautizada como la Turd Road-90, en el Maine profundo, a cuatro horas de la civilización. Un catedrático que escribe el grueso de un libro en una tormenta, en pleno acceso de gripe. Al final, puede volver con su mujer y sus hijas, así como la novela no puede con él, cosa que un anterior relato corto casi acaba con su familia, como menciona el relato corto. Una rata insidiosa en plena alucinación, probablemente solo viera un peluche con forma de rata, le propone un trato.
Pienso que no defraudará.
Carlos Alberto Ponferrada Almagro.